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Del Ribatejo portugués al oasis francés de Orthez, sin parar en el desierto español ( y 2 )

Imponente el encierro del hierro portugués de Veiga Teixeira ( éstas pastan en tierras del Alentejo ) que fue lidiado el pasado sábado en Orthez. Los «pintobarreiros» tuvieron gran seriedad sin por ello  ser feos de hechuras. Al contrario.   Pasarían en Pamplona, Bilbao, Madrid…….. Madrid ?? De novillada para estrellar a chavales poco placeados   Cinco negros y un castaño saltaron al coqueto coso francés. Alguno con hechuras que recuerdan a sus ancestros de Oliveira.   En el cartel tres toreros con diferentes estilos que estuvieron a la altura de las circunstancias: Fernando Robleño, Paulita y Serafín Marín. Un joven veterano en el mejor momento de su carrera y dos de los mejores capoteros del escalafón.   Fernando Robleño sorteó un lote dispar. Un primero, castaño, de complicada lidia que lo metió en el canasto tras desengañarlo con un eficaz inicio de faena. El toro, como toda la corrida, acudió tres veces al caballo lo que acusó en la muleta.

 

 

 

  Con el segundo de su lote demostró que está en un gran momento, desde el recibo con el capote hasta el último tercio, trazando los mejores muletazos de la tarde con la mano derecha.    

 

 

    Toro bravo en todos los tercios que realizó una gran pelea en varas, como casi toda la corrida.           A parte de a todos los picadores, cabe destacar a Ecijano II, Roberto Bermejo y a Juan Carlos García por la memorable lidia que  dio a este ejemplar, colocando al toro en banderillas llevándolo muy largo con una sutileza increíble con lo que «pesa» un toro en esta placita. Le hubieran tocado la música en Sevilla ….????  

 

        El diestro maño Antonio Gaspar «Paulita» se enfrentó a un serio lote con el que destacó con el capote, tanto por delantales como en las medias.

 

              En la muleta, sus dos ejemplares colaboraron poco pese al esfuerzo del torero aragonés.         Por su parte, Serafín Marín aprovechó la movilidad de su primer toro para cortarle una oreja. El animal llegó boyante al último tercio pese a la dura pelea en varas.         Su trasteo cogió vuelo cuando el de catalán se echó la muleta ala mano izquierda.

 

      El que hizo sexto realizó una gran pelea en varas ejecutada con maestría y riesgo por Romualdo Almodívar.

 

          De esta formidable jornada taurina en territorio galo podrían sacarse varias conclusiones:   – La suerte de varas no se realiza como Dios manda, no sea que vean que el toro es bravo. – No hay nada más bonito que el momento de la arrancada de un toro al caballo puesto de largo. – Con toreros, novilleros y cuadrillas dispuestos, ganaderos íntegros y comisiones independientes, hay esperanza.

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  1. Que belleza!!! enhorabuena vuestras fotografías engrandecen la tauromaquia. Gracias por compartirlas

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